miércoles, 14 de agosto de 2013

Que es la vida?


¿QUÉ ES VIDA?

No existe una definición expresa de vida, sino que a partir de observaciones directas e indirectas del estado térmico de las estructuras vivas, podemos decir lo siguiente:Vida es la dilación en la difusión o dispersión espontánea de la energía interna de las biomoléculas hacia más microestados potenciales.
EXPLICACIÓN BÁSICA DE ALGUNOS TÉRMINOS USADOS EN LA DEFINICIÓN DE VIDA:

1. Demora no es lo mismo que reversión. Muchos autores dicen que la vida consiste en invertir la Segunda Ley de la Termodinámica, lo cual es falso. La segunda ley de la termodinámica se refiere a que la energía siempre fluye desde un sistema o espacio con alta densidad de energía hacia otro sistema o espacio con una densidad de energía menor. Esto es lo que ocurre en la vida. El universo siempre tendrá una densidad de energía mayor que la de los biosistemas. Si fuese de otra forma, la vida no sería posible.

La confusión se originó cuando se subordinaron las propiedades correlacionadas con la entropía, como el orden y la complejidad; sin embargo, para estar ordenado, o para ser complejo, el biosistema debe transferir desorden hacia el universo y tomar complejidad desde el universo. Entonces, no existe violación o reversión alguna a de la segunda ley, toda vez que el sistema es más desordenado que el universo, y su desorden fluye desde el sistema más desordenado hacia el menos desordenado.

Lo que ocurre en los biosistemas es una demora en la difusión o dispersión de su energía interna; sin embargo, esa energía interna nunca fluye de campos de menor densidad de energía hacia campos de mayor densidad, sino al contrario, obedeciendo a la segunda ley de la termodinámica.

2. Estado se refiere a la posición, movimiento y densidad de la energía transportada por partículas, en este caso, de las partículas que establecen la función de distribución de la energía en intervalos de retardo en un biosistema; por ejemplo, los fermiones y los bosones.

Los fermiones son partículas con un momento angular intrínseco cuya función ћ (spin) es igual a una fracción impar de un entero (1/2, 3/2, 5/2, etc.), razón por la cual los fermiones obedecen al Principio de exclusión de Pauli, es decir, no pueden coexistir en una misma posición. Ejemplos de fermiones son todas las partículas que constituyen a la materia, por ejemplo, electrones, protones, neutrones, quarks, leptones, positrones, etc

lunes, 5 de agosto de 2013

NIÑOS QUE MUEREN SIN BAUTIZAR.

  
Niños, natos o nonatos, que mueren sin el bautismo de agua.  ¿Pueden llegar a la visión beatífica en el cielo?.  Esta pregunta ha sido discutida por siglos y dio lugar al concepto teológico llamado "limbo" que, aunque muy conocido, no es ni nunca fue dogma de la Iglesia.
Aunque el magisterio de la Iglesia no se ha definido sobre esta cuestión, hay principios de la doctrina Católica que deben ser tomados en cuenta. El Segundo Concilio de Lyons (1274) y el Concilio de Florencia (1438-45) explícitamente definen que aquellos que mueren con “sólo el pecado original” (Peccato vel solo originali) no alcanzan el cielo. 
Pero en muchos casos la falta de bautismo no es por negligencia ni rechazo. Sabemos que, de acuerdo a la voluntad salvífica universal de Dios, de alguna forma El da a todas las personas la oportunidad de alcanzar el cielo. Por  eso hay que considerar las palabras del Concilio Vaticano II en la Constitución Dogmática sobre la Iglesia: 
 Aquellos que, sin tener culpa propia, no conocen el Evangelio de Cristo o de su Iglesia, pero que sin embargo buscan a Dios con un corazón sincero, y, movidos por la gracia, tratan a través de sus acciones de hacer Su voluntad, como la conocen a través de los dictados de su conciencia - ésos también podrán conseguir la salvación eterna” (Lumen Gentium, 16)
El Catecismo de la Iglesia Católica enseña:
En cuanto a los niños muertos sin Bautismo, la Iglesia sólo puede confiarlos a la misericordia divina, como hace en el rito de las exequias por ellos. En efecto, la gran misericordia de Dios, que quiere que todos los hombres se salven (Cf. 1Tim 2,4) y la ternura de Jesús con los niños, que le hizo decir: "Dejad que los niños se acerquen a mí, no se lo impidáis" (Mc 10,14), nos permiten confiar en que haya un camino de salvación para los niños que mueren sin Bautismo. Por eso es más apremiante aún la llamada de la Iglesia a no impedir que los niños pequeños vengan a Cristo por el don del santo Bautismo.  -Catecismo 1261
En cuanto a cuando es que un niño debe de ser bautizado, el ritual Romano dice, “la consideración principal es el bienestar del niño(a), que no debe de ser desposeído del beneficio del sacramento.”  De ahí que, “si el niño(a) está en peligro de muerte, deberá ser bautizado sin demora.”

¿Qué sucede con los niños fallecidos sin el bautismo?
Responde el teólogo Peter Gumpel, S.J. 

14 diciembre 2004 ¿A qué lugar del cielo van las almas de los niños que mueren antes del parto o, poco después, y por lo tanto antes de ser bautizados? ¿Dónde van los niños abortados?

«Según la doctrina católica, todos nacen con el pecado original, nadie puede entrar en la visión beatífica si no supera el pecado original. La vía normal es la de ser bautizado, es un medio infalible para asegurar la plena felicidad en la visión beatífica»

--Pero, ¿qué sucede a quienes mueren sin bautismo?

--Gumpel: Aunque en la historia ha habido opiniones diversas, el supremo Magisterio de la Iglesia ofrece documentos y afirmaciones muy precisos.

En especial, en la lucha entre san Agustín y Pelagio, este último negaba el pecado original, mientras que Agustín, doctor de la Iglesia, afirmaba su existencia. En el tiempo de san Agustín, existía la doctrina, según la cual, fuera de la Iglesia no hay salvación, por lo que los no bautizados, adultos o recién nacidos, se creía que no podían entrar en la visión salvífica.

En este contexto, san Agustín habla de los niños muertos sin bautismo y piensa que su destino es el infierno, diciendo que están sujetos a las llamas del infierno, aunque añade que son «llamas mitigadísimas». Ante esta consideración tan dura, se presenta el problema de si san Agustín no habría considerado una suplencia al bautismo por el agua. Por ejemplo el bautismo de deseo.

Los catecúmenos que habían mostrado su voluntad de entrar en la Iglesia, mediante el bautismo, quizá se podían salvar. Incluso los catecúmenos no bautizados con el agua, pero que sufrían el martirio por la fe en Cristo, podían sin duda salvarse. En este caso, se introduce el concepto de bautismo de sangre.

San Agustín no consideró la cuestión de las personas que desean entrar en la Iglesia.

--Santo Tomás de Aquino propone una visión distinta de la san Agustín, ¿en que cambia?

--Gumpel: Así es. Santo Tomás y los escolásticos abandonan la teoría de san Agustín por la que los niños no bautizados irían al infierno, aunque fuera éste en forma mitigada, y construyen una forma intermedia, conocida como «limbo». Se trata de una construcción teológica, para explicar la situación de los seres humanos que mueren y no están en el cielo.

--Esta teoría del «limbo», ¿ha sido alguna vez presentada por la Iglesia como materia de fe?

--Gumpel: En 1954, realicé un estudio que considero exhaustivo, en el que examiné todos los argumentos a favor de la tesis expresada por el Magisterio infalible hecho con autoridad. Estudié todos los concilios ecuménicos, y llegué a la conclusión de que el «limbo» no es una respuesta obligatoria. Ha sido una opinión que se ha repetido a lo largo del tiempo, sin hacer un examen histórico critico de los concilios ecuménicos.

Antes del Vaticano II, se preparó un esquema titulado «Para salvar en su pureza el depósito de la fe».De modo especial, por impulso de la Facultad Teológica de Nápoles, en el documento se incluyó el undécimo capítulo, que condenaba formalmente a quienes atacaban al «limbo».

Cuando el proyecto llegó a la Comisión general preparatoria, la comisión más importante para la preparación del Concilio, hubo tales objeciones, por parte de los cardenales y otros obispos, que se decidió cancelar este capítulo. La comisión citó para ello explícitamente el estudio que realicé y que luego fue publicado.

--¿Qué dice sobre este tema el Catecismo de la Iglesia Católica?

--Gumpel: El Catecismo de la Iglesia Católica, publicado en 1992, dedica el número 1261 a los niños muertos sin bautismo y allí se lee que se puede esperar que puedan llegar a la visión beatifica.

Se trata de un elemento de máxima importancia, que abre la vía a un punto de vista más abierto, y se trata de un pronunciamiento del magisterio ordinario de la Iglesia. No podemos decir con certeza que se salvarán. Podemos esperar, y el hecho de que podamos esperar, como dice el Catecismo, es una clave interpretativa. Nadie espera o puede esperar legítimamente algo si está seguro de que es imposible.

--¿Cuál es el fundamento de esta esperanza?

--Gumpel: La primera consideración que hay que hacer es que, cada ser humano, aunque haya estado como embrión o como feto en el útero, forma parte de la familia humana y, ontológicamente, en su ser, tiene una relación con todos los hombres y, por tanto, también con Jesucristo, que es la cabeza de la nueva humanidad, el nuevo Adán.

Por la Sagrada Escritura, conocemos la voluntad salvífica de Dios. Cristo es el redentor de todos y quiere que todos se salven. Además Cristo ha fundado la Iglesia, un organismo visible, y ha instituido el sacramento del bautismo. Y, siendo el bautismo un medio infalible, debemos hacer todo lo posible por bautizar a las personas.

Pero, ¿qué hacemos con aquellos que, sin que nadie tenga la culpa, no pueden recibir el bautismo de agua? Tiene que haber otro medio para mantener el designio salvífico de Dios.

No sabemos cuál es este medio. Hay muchas teorías. Por ejemplo, ¿los niños pequeñitos seguirán siendo así o, después de la muerte, tendrán un estado diverso? ¿Es posible que tengan una iluminación divina, con la posibilidad de elegir a favor o contra Dios?

Otros recuerdan el deseo de aquellos padres, buenos católicos, que han concebido un niño y que, ciertamente lo habrían llevado a bautizar si hubiera sido posible, y se preguntan si no basta el deseo de los padres, o si basta el deseo de la Iglesia.

Ciertamente si nosotros no podemos indicar con certeza con qué medio podrían ser salvados, queda el hecho de su unión con Cristo y la voluntad salvífica universal. Este es el punto central.

--¿Por qué el Papa ha pedido a la Comisión Teológica Internacional que profundice este estudio?

--Gumpel: Hoy el problema es más complejo porque, con las leyes que han legalizado el aborto, a muchos niños que podrían haber deseado el bautismo se les quita la vida.

No conozco en detalle la intención del Santo Padre, pero no pienso que quiera volver atrás. La cuestión es más bien de índole pastoral porque, cuando escribí aquellos artículos en 1954, había pocos casos pero hoy, con la multiplicación del número de abortos y los intentos de manipulación de los fetos, el número de seres humanos implicados ha aumentado mucho.

--Queda por último el misterio del alma y su destino...

--Gumpel: Sí. Nosotros nos tomamos en serio un ser humano pequeñísimo, apenas concebido, y lo llamamos persona humana. Si es así, ¿cuál será su estado final, será un feto? ¿Crecerá? Es cierto que está ya separado del cuerpo pero si decimos que tiene un alma, ¿como será esta alma? ¿Quedará este alma en estado de feto, de niño, o se desarrollará?

Como cristianos rechazamos netamente cualquier aproximación eugenésica. Los niños minusválidos, por ejemplo, no quedan con su limitación cuando entran en la visión beatífica, porque ya no hay cuerpo, y el alma no tiene minusvalías.

El alma de estos niños no tiene los obstáculos del cuerpo, y puede llegar al pleno desarrollo de sus facultades mentales. Por tanto, son muchas las razones por las que vale la pena tener esperanza. 

miércoles, 31 de julio de 2013

LAS ETAPAS DEL VIAJE AL MAS ALLÁ BASADO EN EL LIBRO "VIDA DESPUÉS DE LA VIDA"

Las etapas del viaje al más allá.
Según las personas que han estado al borde de la muerte física, hay una serie de etapas que se recorren en ese estado.
Clasificación del doctor Moody. Doctorado en medicina, autor entre otros de los libros "Life after Life" y "Reflections on Life after Life"
- Impresión subjetiva de estar muerto;
- audición de un ruido desagradable y entrada en una región oscura (túnel);
- desdoblamiento del cuerpo físico (extra-corporalidad);
- encuentro con un ser fallecido;
- audición de una voz y aparición de un ser de luz;
- desfile panorámico de la vida;
- sensación de chocar una barrera;
- rechazo o no deseo de volver atrás y entrada a la luz;
- decisión de regresar a la vida;
- modificaciones fundamentales del comportamiento.
Recordemos que el doctor Moody estudió unos ciento cincuenta casos y que cosificó estas experiencias de pre-muerte en tres categorías principales:
- Las vividas por personas declaradas clínicamente muertas y reanimadas.
- Las vividas por heridos o accidentados graves que han visto de cerca la muerte.
- Las vividas por moribundos y agonizantes, capaces todavía de contar lo que sienten.


8 cosas que no sabías de la muerte.

  • Cuando muere una persona, el oído es el último sentido en perderse, el primero suele ser la vista, seguido del gusto, el olfato y el tacto.
  • Una cabeza humana permanece consciente de 15 o 20 segundos después de haber sido decapitada.
  • 100 personas mueren atragantadas por lapiceros cada año. Es más probable morir a causa del corcho de una botella de champán que por una picadura de araña.
  • Cuando el inventor Thomas Edison murió en 1931, Henry Ford capturó su último suspiro en una botella.
  • Más de 2500 personas zurdas mueren al año por usar productos hechos para diestros.
  • Ahora lleva más tiempo la descomposición del cuerpo debido a los conservantes de los alimentos que comemos hoy en día.
  • El creador de Star Treck Gene Roddenberry, fue la primera persona en poner sus cenizas en un cohete y ser ‘enterrado’ en el espacio.
  • Kenji Urada, trabajador de una compañía japonesa, se convirtió en la primera víctima mortal de un robot en Julio de 1981, en una fábrica de coches.

LA MUERTE Y EL DUELO.

¿Qué es el duelo?

El duelo es la reacción emocional, física y espiritual en respuesta a la muerte o una pérdida. Las personas que están de duelo pueden experimentar los siguientes cambios:
  • Sienten emociones fuertes, como la tristeza y la ira
  • Tienen reacciones físicas, como falta de sueño o sensación de náusea
  • Tienen reacciones espirituales frente a la muerte. Por ejemplo, algunas personas se cuestionan sus creencias y se sienten muy decepcionadas de su religión mientras que otras descubren que su fe es más fuerte que nunca
El proceso de duelo lleva tiempo y las heridas se sanan gradualmente. La intensidad del duelo puede depender de si la pérdida fue inesperada y repentina, y de la relación que tenías con la persona que falleció.
Algunas personas escriben sobre el duelo y aseguran que se da en etapas, pero en realidad se suele sentir como "oleadas" o ciclos de dolor que van y vienen según lo que estás haciendo y si existen elementos que te hagan recordar a la persona que murió.
Si perdiste a un familiar cercano, como un padre o un hermano, es posible que sientas que te robaron el tiempo que deseabas pasar con esa persona. También puede resultar difícil expresar tu propia aflicción cuando los demás integrantes de tu familia también están afligidos.
Algunas personas pueden esconder su propia aflicción o evitar hablar de la persona que falleció, porque tienen miedo de entristecer a un padre o a otro integrante de la familia. También es natural sentirse culpable por una discusión pasada o una relación compleja con la persona que murió.
Todos estos sentimientos y reacciones son normales. Pero ¿qué puede hacer una persona para superarlos? ¿Cuánto dura el duelo? ¿Alguna vez todo volverá a la normalidad? ¿Y cómo vas a seguir adelante sin la persona que falleció? 
Enfrentar el duelo
Así como la gente siente el duelo de muchas maneras diferentes, también lo maneja de manera diferente.
Algunas personas buscan el apoyo de otras y encuentran alivio en los buenos recuerdos. Otras tratan de mantenerse ocupadas para alejar su mente de la pérdida. Algunas personas se deprimen y se alejan de sus amigos o evitan los lugares o situaciones que les recuerdan a la persona fallecida.
A algunas personas, las puede ayudar hablar con otros de su pérdida. Algunas lo hacen natural y fácilmente con amigos y familiares; otras hablan con un terapeuta profesional.
Algunas personas quizás no sientan ganas de hablar mucho del tema, porque les cuesta encontrar palabras para expresar una emoción tan profunda y personal, o se preguntan si hablar les hará sentir más dolor. Esto está bien, siempre y cuando encuentres otras maneras de hacer frente a tu dolor.
En algunos casos, la gente canaliza su dolor involucrándose en actividades peligrosas y autodestructivas. Hacer cosas como beber, drogarse o cortarse el cuerpo para escapar de la realidad de una pérdida puede aplacar el dolor, pero la sensación es únicamente temporal. La persona no está realmente enfrentando el dolor; simplemente lo está enmascarando, lo que hace que esos sentimientos se acumulen en el interior, prolongando el duelo.
Si el dolor parece empeorar, si sientes deseos de lastimarte a ti mismo o tienes pensamientos suicidas, habla con alguien en quien confíes y dile cómo te sientes.

Qué esperar?

Puede parecer imposible recuperarse después de perder a un ser querido. Pero la aflicción mejora gradualmente y se vuelve menos intensa con el tiempo. Tal vez, saber algunas de las cosas que puedes esperar durante el proceso de duelo pueda ayudarte a superar el dolor.
Los primeros días después de la muerte de una persona pueden ser intensos, la gente puede expresar emociones fuertes, tal vez llorar o consolarse mutuamente y reunirse para expresar su apoyo y sus condolencias a quienes se ven más afectados por la pérdida. Es normal que sientas que "te estás volviendo loco" y que sientas mucha ansiedad, pánico, tristeza e impotencia. Algunas personas dicen tener una sensación de "irrealidad", como si estuviesen mirando el mundo desde un lugar lejano. Otras se sienten malhumoradas, irritables y con resentimiento.
La familia y los amigos suelen participar en rituales que pueden ser parte de su religión, su cultura, su comunidad o de sus tradiciones familiares (como servicios religiosos, velorios o funerales). Estas actividades pueden ayudar a la gente a superar los primeros días posteriores a la muerte y a honrar a la persona que murió. La gente puede pasar algún tiempo reunida conversando y compartiendo recuerdos de la persona que falleció. Esto puede extenderse por días o semanas después de la pérdida y los amigos y la familia traen alimentos, envían tarjetas o pasan a visitarte.
Muchas veces, la gente muestra sus emociones en este período. Pero, en ocasiones, una persona puede estar tan sorprendida o superada por la muerte que no demuestra las emociones en forma inmediata, aun cuando la pérdida sea muy terrible. No es nada raro ver a las personas sonriendo y hablando con otras en un funeral, como si nada triste hubiese ocurrido. Pero estar junto a otras personas que atraviesan el duelo puede brindar cierto alivio y recordarnos que algunas cosas continuarán igual que antes.
En algunos casos, cuando terminan los rituales asociados con el duelo, la gente puede sentir que deberían haber "superado" la pérdida porque todo parece haber vuelto a la normalidad. Cuando la gente que está de duelo regresa a sus actividades normales, puede resultarle difícil entregarse de lleno a las tareas de todos los días. Muchas personas vuelven a realizar sus tareas normales después de unos pocos días o de una semana. Pero si bien es posible que no hablen tanto de su pérdida, el proceso de duelo continúa.
Es natural continuar teniendo sentimientos y preguntas durante un tiempo después de la muerte de una persona. También es natural comenzar a sentirse un poco mejor. Depende mucho de la manera en que la pérdida afecte tu vida. Está bien estar afligido durante días, semanas, o incluso más tiempo, según cuán cercana era la persona fallecida.
No importa cómo elijas pasar tu duelo, no existe una manera correcta de hacerlo. El proceso de duelo es gradual y dura más en algunas personas que en otras. Puede haber momentos en los que pienses que nunca disfrutarás de la vida de la misma manera, pero ésta es una reacción natural después de una pérdida.

lunes, 29 de julio de 2013

¿Por qué hay un intervalo de tiempo entre dos reencarnaciones?

En el transcurso de la investigación de las vidas pasadas de una persona a través del trance hipnótico, se ha encontrado que el intervalo de tiempo entre dos reencarnaciones en la Tierra podría ser en promedio de 50 a 400 años. Las razones son las siguientes:

El cuerpo sutil se queda en el Cielo o en el plano de existencia de las Tinieblas por períodos de tiempo variables para experimentar felicidad o pena según sus méritos y deméritos (pecados).
Las circunstancias en el plano de existencia de la Tierra necesitan ser favorables para completar la cuenta de toma y daca que se tiene con varias personas desde  nacimientos anteriores, según la  ley del Karma. La reencarnación del cuerpo sutil se pospone hasta el momento en el que otras personas con las cuales se tiene una cuenta de toma y daca están preparándose también para reencarnarse.
Algunas veces en la regresión a vidas pasadas, una persona no informa sobre una reencarnación durante el estado de trance. La razón es que cierta reencarnación ha  podido tener pocos incidentes o haber sido breve y la persona no recuerda los detalles.
En el caso de los cuerpos sutiles que han sido relegados a los planos más profundos de existencia del Infierno, el lapso de tiempo entre dos reencarnaciones podría ser de miles de años. Se quedan en sus correspondientes planos de existencia del Infierno hasta el momento en el que han cumplido con su castigo. En la mayoría de los casos, esto significa languidecer en el plano de existencia del Infierno hasta la disolución del Universo

1. ¿Qué sucede con nuestro cuerpo después de la muerte?

La investigación espiritual ha mostrado que el ser humano está compuesto de los siguientes cuatro cuerpos básicos:

  • Físico
  • Mental
  • Causal o intelectual
  • Supracausal o ego sutil
La siguiente imagen es una representación diagramática de lo que está compuesto un ser humano.
 
Cuerpo sutil despues de la muerte
 
Cuando una persona muere el cuerpo físico deja de existir. Sin embargo, el resto de su existencia o conciencia continúa. La existencia de la persona menos el cuerpo físico se conoce como cuerpo sutil (linga deha) y está compuesto de los cuerpos mental, causal (intelecto) y supracausal (ego sutil). Este cuerpo sutil  va luego a uno de los 13 planos sutiles de existencia excepto el plano de la Tierra.